05/07/2023. ABR. Fotos: Biel Modino. Comunicación: promocio@doplaillevant.com
Seguimos avanzando en los meses del año y los viñedos van cambiando de aspecto. En primavera pudimos ver cómo se formaban brotes con las primeras hojas. Después, en la transición entre primavera y verano, se dio la floración y la fecundación de los granos de uva. Ahora estamos en pleno período herbáceo que será seguido del envero, maduración y, finalmente, la vendimia.
El período herbáceo tiene una duración que depende de cada variedad de viñedo, oscila entre 45 y 65 días. En este período los cambios que podemos observar son cómo los granos de uva crecen y van ganando volumen. Esto se debe a la multiplicación de los tejidos internos. En estos tiempos los granos se comportan como si fueran una hoja más de la cepa y realizan la fotosíntesis de nuevos productos. Si nos fijamos con las fotos que acompañan a este texto podemos ver unos puntos en la piel, 30 o 40 por cada grano, son los estomas, órgano por donde entra el aire en la planta y se extrae el CO2 necesario para la fotosíntesis. Por la misma apertura se libera el oxígeno formado en el proceso fotosintético.
En las capas más externas de los granos se acumulan los cloroplastos, donde se realiza propiamente la fotosíntesis. El resultado de esta actividad es el inicio de la acumulación de metabolitos, unos 20 gramos de azúcar por kilo y la misma cantidad de ácidos. En las próximas fases seguiremos hablando de estos compuestos.
Este período tiene dos fases, la primera, ya comentada y visible, es el aumento de tamaño de los granos. La otra, no tan visible, es que los huesos van madurando y al final son fértiles y podrían germinar reproduciendo la planta.
