14/05/2021. ABR. Comunicación: promocio@doplaillevant.com
Toni Gelabert ha sacado su nuevo vino, Blanc Selecció 2021. Se trata de un vino muy especial que únicamente sale al mercado cuando considera que tiene una gran añada de las variedades que lo componen: macabeo y viognier. Antes, solo se había comercializado en los años 2010 y 2014. Este vino ha contado con la colaboración especial del artista Guillem Nadal.
Toni Gelabert, es un vinicultor de Manacor que tiene una gran sensibilidad cultural. Sensibilidad que sabe transmitir a sus vinos y a la forma de presentarlos. En años anteriores ha presentado sus proyectos: Fusió 5-I y Fusió 5- II en colaboración con los artistas Albert Pinya y Guillem Nadal con el que vuelve a colaborar en esta ocasión. El vino se presenta en cajas de seis botellas acompañadas de una transparencia impresa hecha por el pintor. Esta imagen se ha dividido en seis fragmentos iguales, cada uno de los cuales es la etiqueta de una botella. Vinicultor y pintor establecen una buena simbiosis. Gelabert propone la idea, elabora el vino y Nadal desarrolla la parte artística. Consiguen un resultado excelente.

La forma de conseguir la imagen es muy original. Guillem Nadal extendió una capa de blanco de España sobre un cristal y, una vez seco, con un punzón realizó el dibujo que se transparentó en la capa de blanco. A continuación coloró ciertas partes y fotografió la imagen. Se imprimieron las transparencias que acompañan a las cajas de vino y se destruyó el vidrio.
Respecto al vino ya se ha dicho que está elaborado con macabeo (o viura) y viognier. El macabeo crece en un viñedo de una treintena de años, es decir, en plena madurez, de suelo profundo y fresco, arcilloso y calizo de color más oscuro que los de call vermell. El macabeo se desarrolla muy bien y debe tenerse en cuenta que esta variedad es complicada. Su calidad depende del año climatológico. Tiene la piel muy delgada y es sensible a las enfermedades. Conseguir que llegue al 14% de contenido alcohólico es difícil, requiere mucho trabajo en el viñedo. Lo que se hace es una selección uva a uva cuando van madurando. Todas aquellas uvas que no pueden dar la calidad suficiente son eliminadas con el objetivo de que la planta pueda alimentar mejor las que quedan, asegurándoles una buena acumulación de azúcares. La vendimia, por supuesto, se realiza a mano.
La viognier es una variedad francesa de excelente calidad. Originaria de la región de Condrieu. Emparentada con la syrah, aunque los estudios de su genóma no han podido establecer el parentesco exacto. En los años 60 del siglo pasado estaba en peligro de extinción, pero fue redescubierta por un grupo de artistas, escritores y pintores. Se produjo un punto de inflexión y ahora está extendida por todo el mundo. En Mallorca fue introducida por Can Majoral. Crece en un terroir similar al macabeo. Variedad muy aromática que conserva el sabor de la fruta.

Cuando las uvas entran en bodega se hace un prensado suave de los racimos enteros para extraer un 60% de su peso en mosto. Este mosto se mantiene unas 24 horas en depósito de acero para hacer el desfangado y cuando comienza la fermentación se traslada a barricas nuevas de roble francés de grano fino proveniente de varios bosques: Tronchais, Allier y Grandes Vosgues. En estas botas se realiza toda la fermentación y se mantiene el vino durante cinco meses. En los primeros tres meses y medio se realiza un remivido constante para conseguir un buen contacto del líquido con las lías. Una vez terminada la fermentación se clarifica con bentonita y gelatina. Se hace una estabilización en frío en depósito de acero a -2ºC durante una semana y, finalmente, se embotella y queda listo para salir al mercado
En este punto Toni Gelabert y Guillem Nadal ya han hecho su trabajo. Ahora toca al lector probar este vino y expresar su opinión.
